RELACIÓN DE PAREJA sana y estable. ¿Cómo es la tuya?

Relación de pareja sana y estable. ¿Cómo es la tuya?

Relación de pareja sana y estable. ¿Cómo es la tuya? Las relaciones de pareja son complicadas, no voy a contarte nada que probablemente no sepas ya. Se forman con el encuentro entre dos personas que han aprendido a relacionarse, a comunicarse y a entender el mundo de manera diferente y entre ambos hay que encontrar una forma nueva y compartida para sentirse a gusto.

Cuando formamos una relación sólida y nos atrevemos a vincularnos con alguien, de alguna manera también lo estamos haciendo con su familia y con todos los aprendizajes que le han ido trasmitiendo.

El encuentro con una persona nueva hasta que se hace conocida es por lo tanto muy complejo, por un lado, porque es una persona distinta a nosotros, que ve y siente el mundo y a los demás de una manera diferente. Y por otro, porque implica habilidades de comunicación, buscar puntos en común y maneras de acercarnos, sobre todo en los momentos de tensión y de
malestar. Por qué… ¿quién se acuerda de todo esto cuando vive un momento agradable con su pareja? Posiblemente pocos de nosotros, sin embargo, para que una relación pueda tener unos cimientos sólidos y estables y una base fuerte y saber cómo reaccionar en momentos de tensión también es importante pararnos a reflexionar sobre todo eso.

¿Solucionas con tu pareja los conflictos o dejas simplemente que el tiempo pase? ¿Os sentáis a hablar sobre lo que os preocupa? ¿Compartís tiempo de calidad, que no cantidad de tiempo? ¿Te sientes en equipo con tu pareja o a veces parece más una competición?

Tomate unos minutos y recapacita…

¿Qué es importante para formar una relación estable y saludable?

• Aprender a discutir. No importa que haya opiniones diferentes, es muy sano y muy normal, lo importante es saber respetar las opiniones del otro.
• Aprender a pedir lo que necesites. Por mucho que queramos a alguien, no nos lee la mente, por lo que expresar nuestras necesidades ayudará a formar un mejor clima en pareja.
• Aprender a pasar tiempo con tu pareja. Todos estamos muy ocupados y más con esta sociedad de la productividad y la multitarea. Pero aprender a dejar el teléfono, el correo y las redes sociales, mirar a tu pareja y tener espacios compartidos os dará calidad y robustez a la relación.
• Aprender a pasar tiempo individual. Estar en pareja no significa simbiosis. Cuando estamos con otra persona no implica que dejemos de ser nosotros. Es importante que también cuidemos nuestro área individual, haciendo cosas que nos gusten; con familia y amigos y que nos dedicamos tiempo de autocuidado personal. De esta forma, podremos trasmitir esa calma y ese bienestar a la relación.
  

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